FE CRISTIANA: Comunicación 17

¿QUÉ SABES DE LA FE CRISTIANA?
Comunicación 17ª

Posible metodología: Leer las preguntas e interrógate si sabes algo del tema. Después, si te parece bien, lees las respuestas que hemos dado.

1. EL MISTERIO PASCUAL, MISTERIO VIVO Y VIVIFICANTE

• ¿Por qué decimos que las palabras y obras de Cristo no pueden quedar en el pasado?

R/ El misterio pascual de Cristo, no puede permanecer solamente en el pasado, pues por su muerte destruyó a la muerte. Todo lo que Cristo es y todo lo que hizo y padeció por los hombres participa de la eternidad divina y domina así todos los tiempos y en ellos se mantiene permanentemente presente. El acontecimiento de la Cruz y de la Resurrección permanece y atrae todo hacia la vida.
Todos sabemos, “se comienza a ser cristiano por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida, no en la vida pasada, sino la vida presente y con ello, una orientación decisiva” De ahí que la fuente de nuestra fe y de la liturgia eucarística es el mismo acontecimiento: el don que Cristo ha hecho de sí mismo en el Misterio pascual.

2. EL MISTERIO PASCUAL EN EL TIEMPO DE LA IGLESIA, LITURGIA Y. SACRAMENTOS

• ¿Qué sentido tiene la liturgia en los Sacramentos?

R/ La Liturgia se considera como el ejercicio de la función sacerdotal de Jesucristo, que mediante signos sensibles, se realiza, según el modo propio de cada uno, la santificación del hombre y así, la santificación de todos los hombres, como Cuerpo Místico, que es, juntamente con su Cabeza, que es Cristo. Y eso lo ejerce mediante el culto público.

• ¿Qué son los Sacramentos?

R/ ‘Son signos visibles de algo invisible que es la gracia’

• ¿Por quiénes fueron constituidos?

R/ Fueron instituidos por el mismo Jesucristo, en el Espíritu Santo, para conceder la Gracia de Dios a los hombres.

• ¿Cuál es el elemento común que otorgan todos los sacramentos?

R/ Todos los Sacramentos otorgan la gracia.

• ¿Qué recibimos en los Sacramentos?

R/ Hay en la Iglesia siete Sacramentos: Bautismo, Confirmación, Eucaristía, Penitencia o Reconciliación, Unción de Enfermos, Orden Sacerdotal y Matrimonio. “Corresponden estos siete Sacramentos a las etapas y momentos importantes de la vida del cristiano: dan nacimiento y crecimiento, curación y misión a la vida de fe del cristiano.
Hay aquí una cierta semejanza con las etapas de la vida natural y las etapas de la vida espiritual. Forman un conjunto ordenado, en el que la Eucaristía ocupa el Centro, pues contiene al Autor mismo de los Sacramentos, al mismo Cristo, Dios y hombre verdadero.

• ¿Cuáles son los Sacramentos que imprimen carácter? ¿Qué significa eso?

R/ Losa sacramentos que imprimen carácter son aquellos que, una vez recibidos, quedan impresos en la persona, de tal modo, que nada, ni nadie los pueden borrar; el Bautismo, la Confirmación, El Orden Ministerial cuya gracia queda en quien los recibió, aunque algunas veces quede velada por algún acontecimiento o por la voluntad libre del que los recibió.

• ¿Por qué los sacramentos son eficaces?

R/ La eficacia de los Sacramentos deriva de Cristo mismo, que actúa en ellos, sin embargo los frutos de los sacramentos dependen de las disposiciones del que los recibe: cuantas mejores disposiciones tenga de fe, conversión del corazón y adhesión a la voluntada de dios, más abundantes son los efectos de gracia que recibe.

• ¿Qué disposiciones se debe tener para que esto sea más efectivo?

R/ El efecto sacramental se produce cuando el signo sacramental es realizado: no actúa en virtud de la justicia del hombre que lo da o que lo recibe, sino por el poder de Dios. Así, cuando un sacramento es celebrado conforme a la intención de la Iglesia, el poder de Cristo y de su Espíritu actúa en él y por él, independientemente de la santidad personal del ministro.
De la misma manera, si se realizan los signos, pero no se hacen conformes con la intención de la Iglesia, el Sacramento no es válido. (Hoy día se habla mucho de bautismo por lo civil, primera comunión, matrimonio por lo civil...)

3. LA LITURGIA

• ¿Qué es la liturgia?

R/ La Liturgia cristiana podemos definirla como la “acción de Dios que nos une a Jesús a través del Espíritu”, posee una doble dimensión, ascendente y descendente. Es acción del Cristo total, por eso es toda la Comunidad, el cuerpo de Cristo unido a su Cabeza quien celebra esa Liturgia.
En el centro de la asamblea se encuentra se encuentra por tanto el mismo Jesucristo, resucitado y glorioso. Cristo precede a la asamblea que celebra. Él, con el Espíritu Santo la convoca, la reúne y la enseña.
Cristo, Sumo y eterno sacerdote es el protagonista principal de la acción ritual; si bien se sirve de sus ministros para representar (hacer presente, real y verdaderamente, el aquí y ahora de la celebración litúrgica, su sacrificio redentor y hacernos partícipes de los dones conviviales de su Eucaristía.

• ¿Por qué decimos que la Liturgia no puede ser manipulada por el ministro o comunidad en particular?

R/ Así, las acciones litúrgicas no son acciones privadas, sino celebraciones de la Iglesia... pertenecen a todo el cuerpo de la Iglesia, influyen en él y lo manifiestan, pero afectan a cada miembro de este cuerpo de manera diferente, según la diversidad de órdenes, funciones y participación actual.
En cada celebración litúrgica coparticipa toda la Iglesia, cielos y tierra, Dios y los hombres. La liturgia cristiana, aunque se celebre solamente aquí y ahora, en un lugar concreto y dentro de una comunidad concreta, es por naturaleza católica, proviene del todo y conduce al todo, en unidad con el Papa, con los Obispos en comunión con el Papa, con los creyentes de todos los tiempos y lugares ‘para que Dios sea todo en todas las cosas.
Desde esta perspectiva es fundamental el principio de que el verdadero sujeto de la Liturgia es la Iglesia, comunión de todos los santos de todos los lugares y de todos los tiempos. Por eso cuanto una celebración esté animada de esta conciencia, tanto más concretamente en ella se realiza el sentido de la Liturgia.
Si estamos convencidos de que estas acciones litúrgicas no son acciones privadas, sino que son acciones de toda la Iglesia, no podremos nunca manipularlas a gusto de los miembros de la Comunidad eclesial o del Sacerdote que preside.

Juan José García Torralbo
Pozoblanco a 28 de Junio de 2010