Comunicación 18ª
En el Libro de Job nos dice cómo hemos de reconocer a Dios y si no lo hacemos, no podremos conocerlo nunca.
## Debemos reconocer a Dios como el creador. De otra manera, no le conocemos.
¿O quién encerró con puertas el mar, cuando, irrumpiendo, se salió de su seno; cuando hice de una nube su vestidura, y de espesa oscuridad sus pañales; cuando sobre el establecí límites, puse puertas y cerrojos, y dije: "Hasta aquí llegarás, pero no más allá; aquí se detendrá el orgullo de tus olas?" (Job 38, 8-11)Si sabemos que "el temor del Señor es el principio de la sabiduría..." (Prov. 1:7), entonces, la ignorancia sobre el Señor es el principio de las tonterías. ¿Qué es el hombre para pensar que puede competir con Dios? ¡Qué absurdos podemos ser a veces! Si tenemos problemas en luchar con la fuerza del mar, solo una pequeña parte de Su creación, ¿cómo podemos competir con El? Nuestras limitaciones son tan estrechas, y El no tiene limitación alguna.
## Debemos reconocer el poder de Dios. De otra manera, no le conocemos.
“Alguna vez en tu vida has mandado a la mañana, y hecho conocer al alba su lugar... Más se quita la luz a los impíos, y se quiebra el brazo levantado... (Job 38, 12-15)## Debemos reconocer la autoridad de Dios. De otra manera, no le conocemos.
Es la autoridad de Dios que ordena al sol, al tiempo, a todo el Universo.
¿Has entrado en las Fuentes del mar, o andado en las profundidades del abismo? ¿Te han sido reveladas las puertas de la muerte, o has visto las puertas de la densa oscuridad? ¿Has comprendido la extensión de la tierra? Dímelo, si tú sabes todo esto. (Job 38, 16-18)De la misma manera que Job no tenía respuesta a las preguntas de Dios, sí se da cuenta de grandiosidad de Dios.
El conocimiento de Dios sobre el Universo sobre pasó a Job y sobrepasa en gran a todos nosotros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario